WALL-E y el Apocalipsis

Hace mucho tiempo que he visto WALL-E y en ese tiempo he tenido la oportunidad de sacar a veces la conversación y preguntar a la gente qué les ha parecido. 

No es estadísticamente relevante como muestra de la sociedad, pero al menos para mi, sí que lo es lo que me han contestado.

El argumento de la película es básicamente que, en un futuro lejano, el planeta es incapaz de albergar la vida, porque la sociedad lo ha contaminado con la basura que genera y no recicla. 

Finalmente toda la humanidad se extingue. 

O no toda. 

Cuando la crisis llega a su punto álgido y ya no se puede ni respirar, la humanidad construye una nave espacial, que más parece un crucero de placer, para los más privilegiados.

Esta casta viajará por las estrellas durante generaciones, hasta que nuestro querido planeta Tierra se regenere, entonces regresarán y lo colonizarán.

Cuando entran en la nave se puede apreciar que son un grupo muy homogéneo, parece que la vida no les ha tratado mal y que no les preocupa mucho a quienes han dejado atrás, para que mueran.

Viven despreocupadamente en el crucero de placer con todas las comodidades posibles, los robots les cuidan y les proporcionan todo lo que necesitan hasta el punto de que ninguno se cuestiona de donde viene o qué hace allí. Ni siquiera el Capitán de la nave, que después de muchas generaciones, tampoco recuerda cual es el sentido de su existencia.

Pasado un tiempo, mucho tiempo, la nave vuelve a un planeta desierto pero libre de contaminación, ya pueden colonizarlo de nuevo, no saben ni qué hacen allí, ni de donde vienen, pero por lo visto es un final feliz. 

Ya está, esa es la película.

O no exactamente.

Resulta que uno de los robots encargado de reciclar la basura se llama WALL-E, es un robot que lleva funcionando mucho tiempo y parece tener una personalidad propia, incluso "sentimientos" y tanto lo parece, que se enamora de otro robot que se llama EVE.

Pues si preguntas a la gente si les gustó la película, te contestan que sí, que está muy bien (¿muy bien? ¿en qué sentido puede estar bien?) y que el robotito es muy mono. 

Si preguntas más te hablarán de las escenas del robotito, de la pena que dá cuando parece que se muere y lo estupendo que es que al final no muera.

Si te tomas un antiácido para el dolor de estómago y continúas preguntando, te darás cuenta de que no van a salir de ahí. La película se llama WALL-E y ellos se han enterado muy bien de qué va. Me pregunto si han visto la misma película que yo.

Porque es verdad que la historia del robotito es encantadora, pero a ver, para mi el hecho de que la humanidad se extinga ahogada en su propia mierda y se salven cuatro caraduras que a saber cómo han conseguido el pasaje a la eternidad, o mejor dicho, que todos sabemos muy bien cómo han conseguido ese pasaje, no sé, hace que la historia del robotito pierda importancia.

Si fuera un experimento social diría que han conseguido demostrar, más allá de toda duda, que las personas nunca miran la luna, sólo miran el dedo que la señala.

No es que se me haya ido la pinza más allá de lo normal y sólo vea lo malo de la historia, es que la historia es la que es, no se trata del amor de un robotito por otro en Marte, ni en una fábrica de hacer colchas de Patchwork, no, la historia es la que es y es alucinante como la realidad de fondo se obvia y se desprecia, como si careciera de importancia.

¿En qué sentido puede ser más importante cualquier historia que el hecho de que la humanidad no sólo se extinga, sino que al hacerlo, no lo haga en un "todos a una", sino que se salven los más privilegiados? ¿existe alguien que se haya inquietado al menos un poquito por la flagrante injusticia social que eso supone?.

Creo que lo que ocurre es que todos piensan que en el crucero irían ellos y las personas que quieren, y eso me preocupa aún más, porque no sólo es que son idiotas, sino que además son irremediablemente egoístas.

En fin, la próxima vez que preguntéis a alguien sobre WALL-E, estoy segura que ya no escucharéis del mismo modo su respuesta. Algo es algo.